Buscar en este blog

miércoles, 9 de junio de 2010

Sesión II

La sesión de hoy también ha resultado bastante predecible. Después de comentarle algunos aspectos de mi familia que me ha preguntado, primero me ha soltado una perorata sobre cómo funciona el sistema nervioso. Ha dibujado una campana de Gauss, poniendo "Rendimiento" en el eje vertical y "Estímulo / Ansiedad" en el horizontal. Quería explicarme que si bien cierta cantidad de estímulos pueden producir respuestas (rendimiento), cuando hay demasiados estímulos o bien los solemos ignorar, o lo que es peor, nos pueden producir ansiedad, que hace que la respuesta sea menos efectiva cada vez. No sé si es un gráfico muy adecuado para explicarlo, pero se entiende lo que quería decir.

Me ha comentado que el objetivo que tenemos para que yo mejore, consiste en eliminar todo lo que me está impidiendo disfrutar y centrarme en lo que puedo sentir. Que aunque tuviese algún problema físico (cosa que todavía no sabemos, pero de lo que yo sigo convencido), la idea es potenciar lo que pueda dentro de las posibilidades: aunque quizá (si existe tal problema físico) no llegue a estar tan bien como antes de tener el problema, la meta es rebajar la ansiedad al mínimo y aumentar las sensaciones tanto como sea posible.

Después me ha estado contando en qué consistirían los ejercicios que debo hacer, igual de predecibles que todo el discurso. No quiero ser duro con ella; simplemente son cosas sobre las que ya he leído muchas veces. Yo creo que no se trata de nada que no haya hecho ya; si acaso puede variar un poco el método y en eso intentaré centrarme. Quizá sería mejor intentar recordar sus palabras, aunque no sean exactas.

Es normal que a veces no te apetezca hacer sexo. De hecho, la primera condición para comenzar con estos ejercicios es que sólo lo hagas cuando te apetezca de verdad. No te fuerces, no te masturbes sólo por "a ver qué tal se da esta vez". Cuando encuentres el momento en el que te apetezca y estés excitado sexualmente, relajado y no vayan a interrumpirte, entonces puedes ponerte a ello.

Al principio, para ayudar a aumentar las sensaciones, puedes servirte de lo que sea que te excite: fantasías, pornografía... Empieza viendo o imaginando estas cosas de modo que cuando empieces a masturbarte despacio, la excitación vaya en aumento.

Cuando ya estés plenamente excitado, debes pasar a la segunda fase del ejercicio, que consiste en eliminar los estímulos que hayas estado usando (porno, imaginación...), irte a un lugar relajado y continuar masturbándote lentamente, pero ahora únicamente centrando tu atención en las sensaciones que tienes. Puede que en algún momento vuelvas a los estímulos anteriores (por ejemplo con la imaginación), pero debes centrarte en las sensaciones, para aislarlas de todo lo demás. Después, cuando te apetezca, eyaculas.

Puede ocurrirte que una vez te pongas con el ejercicio, sientas que no es el momento, que no te está satisfaciendo. Es normal que a veces pierdas la concentración, pero no por demasiado tiempo. Si ocurre durante más de medio minuto, será mejor dejarlo para otra ocasión. No te fuerces por terminar. De esta forma, lo único que consigues es enlazar cada vez más fuerte en tu mente las malas sensaciones.

Si te apetece, puedes utilizar algún lubricante. Puedes hacerlo alguna vez con él y otra sin él para poder comparar. En cuanto a la frecuencia, como digo, debe ser cuando te apetezca de verdad. Quizá unas 3 veces por semana puede estar bien, aunque por supuesto pueden ser más o menos, dependiendo del deseo.

Una vez acabes, debes anotar la satisfacción que hayas obtenido, en una escala de 0 a 10. Debes indicar si has usado lubricante o no y en su momento, comentaremos más detalles para ir ajustando el proceso.

Entiendo que puedas no tener fe en esto. No hace falta que la tengas. Entiendo que pienses que no vaya a funcionar. Simplemente, haz los ejercicios y vamos valorando cómo evolucionar. Esto es un método de sensibilización adulto y como tal, ninguno de los dos vamos a estar a gusto si no nos esforzamos.


Pues nada, poco más me queda por añadir... Me ha recomendado que tome vitamina B porque según comenta es "el alimento del sistema nervioso" y por lo que comenta, no pasa nada aunque no las necesite, puesto que el sobrante se elimina. Le he dicho que ya tomé esas vitaminas hace tiempo y no noté ninguna mejoría, pero volveré a tomarlas (todavía tengo medio envase en la nevera)

Por último, hemos anotado las siguientes consultas (la suya y otras a las que tengo que acudir, de momento los días 14 y 30). Y por suerte, le he pedido que me hiciera una factura para cobrarme y parece que no habrá problema (este punto me preocupaba un poco; me está costando bastante y al menos quería tener un documento donde se detallase la terapia).

Seguiremos "informando"...

No hay comentarios: